“Vengo a Miami cuando necesito malcriarme”, dice Coki Ramírez desde las páginas de Gente, revista que la muestra disfrutando unas vacaciones luego de presentar su disco “Se puede” por el país.
Sin amores a la vista, la cordobesa disfruta las playas y especialmente las ofertas de la ciudad del sur de Florida, en Estados Unidos. “Mi fetiche son los zapatos, tengo cientos de pares que disfruto, acumulo y finalmente regalo”, confía a la publicación.
“Me hace bien la soledad. Muchos dicen que Miami es grasa pero eso lo determina la onda con la que la vivas. A mí me completa, me da la paz que necesito para imaginar y crear sin presiones”, indica la intérprete.
Pero eso sí: Coki sigue soñando con un amor. “Busco un compañero de vida… morocho”, bromea. “Alguien con proyectos propios y hambre de progreso. Si es kiosquero, que sueñe con un hipermercado. Si me calienta no me importa nada más. Soy una mina muy sensorial para el amor”, concluye.
